jueves, 23 de julio de 2009

La Casa del Poeta



La segunda de nuestras discusiones era con respecto a la casa. Yo le pedía que, reservándose la dirección de por vida, convirtiera a la casa en una institución con personería jurídica y, si quería que esta siguiera una línea según sus conceptos que delineara las bases de una constitución inamovible. Pero que evitara la posibilidad de que ante una muerte imprevisible la casa desapareciera. En esto no estaba el, totalmente en desacuerdo, pero no llego a hacerlo si es que alguna vez lo pensó, porque falleció bastante imprevisiblemente. Y sucedió: Perdimos la magia, La Casa del Poeta ya no existe. Pero no voy a decir que en esta gané yo, porque de ninguna manera me alegra.
Ver: www.elarcadeple.com o www.pedrolapidoestran.com

No hay comentarios: