jueves, 23 de julio de 2009

Julio Cesar Mastay



Julio Cesar Mastay, fue escritor y poeta - entre otras cosas-, pero fundamentalmente fue, el gestor Mecenas de un lugar inolvidable: "La Casa del Poeta" de la ciudad de La Plata; un lugar mágico que tuvo enorme trascendencia y que hoy ya no existe, como no existen muchos de los personajes que contribuyeron a crear esa magia.
Tuve la suerte de poder considerarme su amigo, pese a las diferencias de criterio que manejábamos. Recuerdo vivamente dos discusiones, de las cuales - a esta altura de mi vida - creo que en una, la razón era de el y en la otra, era mía.
Yo insistía en que no llenara la casa de gente vana, que eligiera individuos con valores creativos auténticos y que los concentrara en ella. Soñaba con que la casa se convirtiera en una especie de escuela medicea, y le hablaba de como Lorenzo de Médicis había logrado reunir en su casa un conjunto de valores inigualables: Y el solo se reía y me contestaba que ni el era Lorenzo el Magnifico, ni La Plata era la Italia Renacentista. Decía que el le abriría las puertas a todos, porque los que hoy no eran, mañana podrían ser, pues todos tenemos la posibilidad de aprender, lo que algunos nacen sabiendo. Me decía que por el trabajo y el esfuerzo, también se llegaba al talento y yo le contestaba: "Lo que natura non da, salamanca non presta". Cosas de la soberbia: EL TENIA RAZÓN.
Ver: www.elarcadeple.com o www.pedrolapidoestran.com

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